Cerca de 25.000 personas han bloqueado dos de las cuatro calles aledañas al estadio Castelao, en la localidad de Fortaleza, horas antes de que se enfrentaran allí la selección de Brasil con la de México en partido de la Copa Confederaciones.
Durante toda la tarde, antes del partido, se registraron enfrentamientos entre los manifestantes y la Policía, que disparó balas de goma y gases lacrimógenos contra los participantes de la protesta, que claman contra la corrupción y el gasto excesivo en la organización del Mundial de fútbol. Cuando parecía que las protestas se apaciguaban, una minoría volvió a enfrentarse a la Policía, que tuvo que emplear gases lacrimógenos.
"Un pequeño grupo, el 1% de los manifestantes, se enfrentó, pero mantenemos el control. Nos quedaremos aquí hasta el final de la demostración. Se usó gas lacrimógeno sólo para mantener el orden", explicó el coronel Cláudio Mendonça, que coordina el operativo de seguridad.
Según Disraelli Brasil, gerente de operaciones de la Autoridad de Tránsito Municipal, el desplazamiento de los autobuses para los aficionados que acudían a ver el partido no se vio afectada.
En la segunda ronda de la fase de grupos de la Copa Confederaciones la anfitriona de la próxima Copa del Mundo 2014 se enfrenta con México. Para los mexicanos, este partido es importante debido a que si no ganan perderán las posibilidad de pasar a la siguiente fase de grupos.
AFP Yuri Cortez
AFP Yuri Cortez
Un grupo de manifestantes protesta a las afueras del estacio Castelao.
AFP Vanderlei Almeida
Este lunes más de 250.000 personas salieron a las calles de las principales ciudades de Brasil, la mayor protesta social registrada en el país en los últimos 20 años, para mostrar su indignación por los 15.000 millones desembolsados por el gobierno en la organización de la actual Copa Confederaciones y la Copa Mundial de fútbol
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