Joven sube a un taxi en la Ciudad de México.
Foto: Benjamín Flores
MÉXICO, D.F. (apro).- En el mundo hay unos 2 mil millones de personas
que sufren de una o más deficiencias de micronutrientes, mil 400
millones más viven con sobrepeso y, de éstas, 500 millones son obesas,
según expertos de la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura
y la Alimentación (FAO).
El primer lugar en obesidad en todo el mundo, de acuerdo con el organismo, es México.
Ante ese panorama, el organismo internacional con sede en Roma lanzó
este martes una campaña mundial para erradicar la malnutrición que
genera carencias alimentarias y obesidad.
En un informe titulado Sistemas alimentarios para una mejor nutrición,
la organización señala que el costo de la desnutrición para la economía
mundial en pérdida de productividad y gastos de atención sanitaria es
“inaceptablemente alto” y podría alcanzar hasta 5% del Producto Interno
Bruto (PIB) mundial: unos 3.5 billones de dólares estadunidenses,
equivalentes a 500 dólares por persona.
Esa cifra representa casi el PIB anual de Alemania, la mayor economía de Europa, señala el documento.
La FAO refiere que si bien continúa su lucha para disminuir, entre
2010-2012, el número de personas que padecen hambre en el mundo, unas
870 millones de personas, es “crucial” combatir la malnutrición y sus
consecuencias.
“Se trata de un informe muy importante, porque la malnutrición tiene
un costo duradero humano, social y económico”, dijo a la agencia AFP Jomo Sundaram, asistente del director general de la FAO, el brasileño Graziano da Silva.
Según el experto, para muchos países de América Latina es posible
eliminar el hambre, es decir, que la población cuente con suficientes
calorías, pero lo más difícil es mejorar la nutrición.
“Se trata de un gran desafío porque en muchas naciones no existe un
responsable para la nutrición. Ese asunto lo manejan varios ministerios y
por ello es necesario hacer un gran esfuerzo de coordinación.
“El desafío es muy diferente si se trata de un país rico o de un país pobre”, abundó Sundaram.
Actualmente, dijo que el país con el mayor nivel de obesidad es
México, más que Estados Unidos, y consideró que “una política oficial
puede marcar la diferencia”.