2 de junio de 2013

Pastor defiende las armas de fuego y enseña a disparar con lecciones bíblicas.

pastor
 “La gente piensa que soy más que otro loco que lleva un arma, pero no es así. No quiero hacer daño a nadie. Yo creo que la Biblia enseña la paz. Pero eso no significa que voy a dejar que otras personas me hagan daño”, pastor James McAbee.
Hace dos años, en una pequeña ciudad de Beuamont, Texas, fue sorprendida por la noticia de que James McAbee, pastor de una iglesia pentecostal, le estaba enseñando a dos adolescentes que robaron una construcción, cómo disparara con una pistola.
Portando su arma McAbee, le ofreció ayuda ofrecida a los ladrones y drogadictos, para que cambiaran sus vidas.
McAbee, había sido un joven con problemas, así que habló con los adolescentes antes de llegar a la policía. Cuando estos llegaron se pusieron de acuerdo para unirse a un programa de recuperación, ordenada por el juez, el célebre pastor dijo que no tenían que disparar a nadie, pero le daría lecciones de disparo y también le enseñaría sobre la Biblia.
Después de este episodio, McAbee, de 36 años, llegó a ser conocido localmente como con el apodo: “el pastor pistolero”. Algún tiempo después, McAbee, decidió aprovechar la nueva fama y a los interesados comenzó a enséñales cómo disparar, junto con lecciones bíblicas.
Con su Glock .40 en una mano y la Biblia en la otra, el pastor citó las Escrituras para justificar su decisión de enseñar a la gente cómo utilizar las armas. “Bendito sea Jehová, mi roca, quien adiestra mis manos para la batalla, y mis dedos para la guerra”, Salmo 144:1 y Lucas 22:36 “Y les dijo: Pues ahora, el que tiene bolsa, tómela, y también la alforja; y el que no tiene espada, venda su capa y compre una”.
Actualmente, más de 100 personas asisten a las clases del pastor. Todos con armas fuego registradas, ya que la ley en el Estado de Texas lo permite. Durante las clases de tiro hacen prácticas de disparo y se enseña un poco de teoría.
Las clases cuestan 50 dólares por estudiante, pero es gratuito para los profesores. En los últimos meses, el negocio se triplicó y McAbee ha capacitado a más de 1.000 personas en lo que va del 2013. También desarrolló una aplicación para móviles y tabletas, donde le enseña a la gente cómo usar una pistola. El costo es el mismo y tiene “estudiantes virtuales” en todo el país.
El pastor dice que creció en Clover, un área rural de Carolina del Sur, donde su abuelo le enseñó a cazar antes de tiempo. Su madre era policía y siempre andaba armada, así que para él, vivir con las armas siempre ha sido una cosa normal.
Cuando su madre recibió un disparo y que quedó paralítica, McAbee, tenía sólo 9 años. Creció y pronto cayó en las drogas, cometió delitos menores, pero a los 18 años, fue condenado a dos años de cárcel por irrumpir en una casa y agredir al propietario. Sirviendo en la penitenciaría, comenzó a leer la Biblia, que su abuelo le había dado y comenzó asistir a las reuniones de estudios bíblicos.
Posteriormente, estudió teología y, al salir de la cárcel, fue ordenado pastor de las Asambleas de Dios, se casó y tuvo hijos. Él presentó dos demandas que su récord estaba limpio, y el gobierno accedió en el 2009. Desde entonces pudo registrar un arma a su nombre. Primero fue un rifle, pues le gusta cazar ciervos.
Cuando asumió el cargo en el 2010, como pastor Lighthouse Worship Center, trabajó con personas de bajos ingresos, donde los tiroteos y las armas en las manos de los adolescentes son comunes.
Además de su rifle de caza, tiene dos pistolas: la .380 y la .40, el pastor tiene un rifle de AR-15. Su esposa también va armada, así que ambos llegan armados a la iglesia siempre.
McAbee, ha sido muy criticado en las redes sociales por enseñarle a la gente a disparar un arma. Él se defiende: “La gente piensa que soy más que otro loco que lleva un arma, pero no es así. No quiero hacer daño a nadie. Yo creo que la Biblia enseña la paz. Pero eso no significa que voy a dejar que otras personas me hagan daño”.
McAbee, tiene una congregación de 30 miembros quienes conocen su testimonio y lo que hace. Actualmente, la familia está a la espera de un permiso federal para abrir una tienda de armas. Sus hijos, Jadyn, de 11 y Connor, de 6 años, aprendieron a disparar con su padre. Por lo tanto, el pastor dice que planea ofrecer clases gratuitas a los hijos de sus estudiantes a manejar un arma.

No hay comentarios:

Publicar un comentario